Katherine no conoce la vergüenza, la desidia, el decoro, la mojigatería y el achante

martes, 17 de noviembre de 2009

Felizmente chiviada


Contrario a lo que podría esperarse, no amanecí felizmente chiviada hoy por el tema del certamen nacional de la belleza. Lula llegó a la una de la mañana de su regular turno de trabajo de los domingos cada quince días, y me dijo quién había ganado el reinado.

Yo, medio dormida, sentí que no había escuchado nada y me hice la loca con el tema. Sin embargo, mi bandeja de entrada hoy me recibió con un mensaje totalmente inesperado, por parte de una de mis lectoras, en el que me informaba debidamente del tema, y me anunciaba que Bolívar, como todos esperaban, era la ganadora del concurso.

Yo ya lo sabía, no sólo por el anuncio de Lula, sino también por la portada de El Tiempo que vi mientras desayunaba. La nueva "cabezona" de la belleza aparecía con un vestido morado, muy sonriente, recibiendo la corona de manos de la pelicortica Michelle Rouillard, quien se veía realmente enana ante dos metros Navarro.

La Señorita Valle, como era caderosamente predecible, no quedó de nada. Contrario a lo que yo esperaba, en defensa de todas las caderonas del país, Valle no se puso un vestido pegado, que le dejara ver la cola en todo su esplendor, y prefirió algo holgado, para disimular su gordurita. Ya decidí que no voy a entutelar a nadie para entrar a ese concurso, no vaya a ser que salga acomplejada.

El tema de hoy, por otro lado, no girará en torno a las medidas de las reinas, sino a los cerebros que tienen. Hemos tenido no pocas discusiones con Lula sobre los niveles de conocimiento que debe manejar una reina y siempre llegamos a la misma conclusión, después de dar un viaje por todas las opciones: no deberían preguntarles nada.

No tiene sentido que les hagan preguntas que finalmente ellas responderán de manera deficiente. Y no deberían hacerlo porque están en un certamen de belleza, no en examen de coeficiente intelectual. Las misses que están ahí se han pasado los últimos años de su vida enfocándose en su cuerpo, no entiendo la verdad por qué nos empeñamos en que a última hora también parezcan inteligentes.

Todas están en la universidad, algunas (muchas) estudiando incluso carreras mucho más complejas que la que yo estudié. Pero eso no es garantía de inteligencia. Tengo excompañeros (as) de clase que todavía me preguntan si los ministros son elegidos por voto popular o si un paramilitar es miembro de la guerrilla.

Como decían en una serie de los 90, dejémonos de vainas. Dejemos de exigirles que sean bonitas e inteligentes y más bien entonces partamos el reinado en dos: por un lado las niñas pilas, dispuestas a responder cualquier pregunta; y por otro, las bonitas, puestas ahí para que lo sean y ya.


Les adjunto la carta que me llegó al correo.


Querida Bloggeera de CORAZÓN



Asumo que no pasaste ni por el canal del reinado. A mí sí me tocó, por trabajo y por curiosear a ver si la señorita Valle quedaba de algo.

Obvio que no quedó, ni su vestido negro ‘sueltico’ le escondió la cadera. Creo que al final ella no era tan poco acomplejada…

El caso compañera es que es necesario que te hagas un blog sobre ese esperpento de acto!!!

“No les deberían preguntar nada. Qué oso!!!!!”, dijo mi jefe y tiene razón. Una dijo q no le cambiaría nada a los hombres porque así eran perfectos!!! (Si fuera Dios) la otra dijo que a las mujeres les dejaría educación (nos dijo maleducadas) que para tener un hogar fuerte ….la otra insinúo que los extranjeros deberían venir al país por las reinas...(sonó proxeneta y todo), por la gente y los mares…

De las otras prefiero no acordarme la verdad….

1 comentario:

  1. Mi Lunareja no pudo ponerme este comentario, entonces me lo mandó por messenger. Aquí lo pongo

    señortia loaiza escuche la cancion pollito con papas de los vaskes, se convertira en su nueva cancion favorita, es de su estilo. att: la lunareja

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